Acuéstate pronto la noche anterior. Para empezar el día con energía, es muy importante que el descanso diario sea suficiente y de calidad.
Recuerda que los adultos debemos dormir entre 7-8 horas para que nuestro organismo funcione a pleno rendimiento.
Empieza con actitud positiva. El resultado de tu día está muy ligado a tu actitud y estado de ánimo, por eso, es importante que enfoques tus primeros pensamientos hacia cosas positivas.

Bebe agua. Probablemente has pasado más de 8 horas sin ingerir nada, ni una gota de agua. Por eso es importante empezar el día con un gran vaso de agua. Deja una botella de agua en la encimera del baño si te es más conveniente. Asegúrate de beber tu agua, te sentirás 10 veces mejor en 10 minutos.
Beber agua tiene muchos beneficios para tu cuerpo, estos son solo algunos de ellos:
- Aumenta la humedad y el brillo de tu piel
- Ayuda a la formación de saliva y moco
- Ayuda a transferir el oxígeno por todo el cuerpo
- Regula su temperatura corporal
- Ayuda a la digestión
- Elimina los residuos y otras toxinas
- Ayuda a la salud del cerebro, la médula espinal y los tejidos
Si el agua se te hace bola, puedes alternarlo con tés, infusiones, o aguas infusionadas, como el agua tibia con limón. Esta última estimula el metabolismo, limpia la boca y la garganta, y proporciona un agradable impulso de energía.
Adelanta una hora el despertador. Puede que este consejo sea difícil de realizar si te gusta remolonear en la cama, pero aporta grandes beneficios a nivel mental y personal. Levantarse una hora antes te permite tener más tiempo para ti, para afrontar el día con más energía, y te demuestra la fuerza de voluntad que tienes.
Prepara un desayuno energético. Es muy importante tomar un buen desayuno lleno de proteínas que reponga las energías perdidas. Prepara un desayuno con fruta, cereales, zumo y té, y olvida las bebidas azucaradas y los “snacks” de la oficina. Tómate el tiempo para sentarte cómodamente, y nota los sabores en tus papilas gustativas mientras masticas lentamente la comida. Esto también proporciona otra oportunidad para centrarse en las afirmaciones positivas.
Haz una check list. Para empezar la jornada con determinación, planificate. Empieza creando una lista de todo lo importante que debes hacer, escríbela y ordénala por orden de importancia. El establecer unos objetivos concretos nos inyectará una buena dosis de motivación para cumplirlos y lograr nuestros objetivos diarios.
Una rutina matutina bien pensada y positiva puede tener un impacto significativo en tu vida, felicidad y éxito. Inténtalo y verás cómo cambia tu día. ¡Con el tiempo verás resultados mucho mayores que los que habías logrado anteriormente!